Seguidores

sábado, 10 de julio de 2021

Mi persona favorita…

Me protegí tantas veces de brindar el corazón de manera íntegra y desenfrenada, que cuando desperté, y un día te vi de frente sonreír, sabía que ya te había entregado todo. 


¿Qué te costaba quedarte? Aferrarte a todos los años de felicidad que planeé, que construí y soñé en mi mente, donde entre otras cosas la perfección tocaba cada una de esas anécdotas. 


Prometí tomar tu mano, y capturar cada momento hasta el final de los días. Sin saber que los teníamos contados. Prometí hacerte sentir feliz con cada acción y palabra, sin saber tampoco, que nos regalábamos ambos, últimos suspiros de vida .


Y es que si, tú te fuiste, pero también en mi, ese día, algo murió. 


Por que si bien es cierto, esta vida es una constante pérdida de metas y sueños. No perdí esas fantasías, ni esos planes. Lo que murió en mi, fue a causa que te perdí a ti, en este plano. Por que seguro estoy que te llevo tatuada en el alma. Pero jamás volveré a sentir el calor de tus palabras o la diversión de tus ocurrencias... no, jamás encontraré nuevamente, lo perfecta que era la vida cuando estabas tú. 


Estás aquí, aún conmigo, puedo sentirlo en cada canción. En tu aroma que se hace presente o en las voces que mencionan mi nombre y se oyen tanto como me hablabas tú. Sin embargo, nadie te suplirá jamás nunca. Por que el lugar que tienes en mi vida, no lo tendrá nadie más. 


El tiempo pasará, creceré y tú, en tu nuevo hogar me mirarás, pero jamás olvidaré nuestro tiempo terreno, y espero, que nuestro amor trascienda en lo espiritual, por que así se sentía quererte. Cómo un amor del alma. 


Me partiste en dos, no más, el día que te fuiste. Por que a pesar que pude quedar hecho añicos, no fue así ; Simple y sencillamente por la única razón de que al partir se quedó una parte conmigo y la otra murió contigo. 


Y así corrió el tiempo, y aún sin aceptar por completo tu partida, entiendo que debo soltarte, pero al hacerlo, recuerdo que, de tener opción nunca hubiera elegido dejar de mirarte. 


Te fuiste de aquí, todo cambió y debo vivir con la falta que me haces. Y ahí, en ese punto en la nada donde siempre me pongo a pensar y pensar cómo sería nuestra vida ahora, me despierta de pronto la cruda verdad. 


Tome tu mano una última vez para unirla en lo eterno. Celebramos mi vida y te di un abrazo sin pensar que ahí me dejabas la tuya. Guarde tu aroma y esa última mirada con el más sincero de los te quiero. Y qué curioso por que te quiero, fue lo último que me dijiste. 


Dormí, y me despertó tu ausencia, presentí lo que venía, y tras confirmar que te habías ido, se me quebró el alma. 


Y una cosa desde ese día sé y estoy seguro. 


Mil personas vendrán, la vida cambiará, pero tú cómo desde el día que te conocí, siempre serás…


Mi persona favorita.

No hay comentarios:

Publicar un comentario